Recién ocurrió
Yo cursaba el primer grado de primaria en el edificio de enfrente, mientras que mi hermano hacía lo propio, pero en tercero, en el del otro lado de la calle. Así nos tenían dispuestos en aquel lejano 1957 en el Colegio Cristóbal Colón: los de primero y segundo por un lado, donde enseñaban puras “misses”, y por el otro los de tercero a sexto, donde prácticamente instruían puros hermanos lasallistas junto con uno que otro “civil”. Al final de la jornada, los chiquillos cruzábamos la calle para irnos a reunir con los grandulones al otro lado de Sadi Carnot, la calle donde se hallaba el colegio en la colonia San Rafael. Esto, para que ahí nos fueran a recoger nuestros padres o para esperar el servicio de los autobuses escolares que nos trasladarían a nuestras casas, como era nuestro caso. Mi hermano Coco, como llamábamos cariñosamente al carnal mayor Nicolás, religiosamente me iba a esperar todas las tardes al zaguán de su patio para encontrarse conmigo una vez que nos hubieran cruzado l...

Comentarios