Hugo Sánchez y Fernando Valenzuela
Ayer que presencié el sorteo del Mundial
de futbol 2026 confirmé mi opinión de que Hugo Sánchez, junto con Fernando
Valenzuela, son los dos más grandes deportistas mexicanos de todos los tiempos,
pues de las escasas personalidades deportivas que fueron entrevistadas durante
la transmisión, fue Hugo con la que más se entretuvo el presentador y a la que
más preguntas le planteó, lo que indudablemente demuestra la dimensión
internacional del divo, y le llamo así porque para muchos es eso lo que
demuestra con su compleja personalidad.
Sin embargo, yo me quedo con la faceta más humana que le conocí hace exactamente treinta años, en diciembre de 1995, en el restaurante argentino Cambalache de Arquímedes, en Polanco, donde el futbolista departía con su esposa Isabel y con sus dos pequeños hijos, y no obstante lo molesto que debe ser para él que continuamente se le acerque la gente, y más en circunstancias tan íntimas, accedió a tomarse numerosas fotografías con nosotros, Elena y las entonces criaturas de cuatro y dos años de edad, Caro y Raúl, y otras dos familias de amigos con las que acudimos al mencionado comedero.
Y ¿por qué digo que Hugo y Fernando son los más grandes de todos los tiempos? Simplemente porque nadie ha brillado como ellos: Hugo, un pentapichichi (campeón goleador cinco veces consecutivas) y múltiples veces campeón nada menos con el Real Madrid en la liga más competitiva e importante del mundo, y Fernando, premio Cy Young, campeón en Series Mundiales, innumerables temporadas de veinte o más juegos ganados e inspirador de la inolvidable fernandomanía en el beisbol más importante del planeta.
Y si lo anterior no fuera suficiente, ambos con vidas personales intachables, por más mamón que alguno de ellos pueda ser.
Nada más para provocar su envidia, les incluyo aquí una foto de Hugo con la hermosa Elena y el pequeño Miguel (qepd), hijo de uno de nuestros amigos, y el cariñoso autógrafo que tuvo a bien dedicarle Hugo Sánchez Márquez a nuestra pequeña Caro (“Para mi amiga Carolina con todo cariño. Hugo Sánchez M. Dic/95”).

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