In memoriam de Diego
Para Diego Armando Maradona, por hacerme testigo protegido y otorgarme el criterio de oportunidad de presenciar en vivo las tres más grandes hazañas de su vida: los dos goles contra Inglaterra en cuartos de final y el campeonato del mundo, en México ‘86. En 1986, IBM de México fue patrocinador y parte del comité organizador del Mundial de futbol de ese año en el país. Como tal, entre otras cosas, prestó terminales remotas en todas las sedes e instaló un centro de cómputo en el CIP (Centro Internacional de Prensa), sito en Campos Elíseos, a un costado del hotel Presidente Chapultepec. Yo fui el responsable de la instalación del software de comunicaciones encargado del manejo de la red así conformada. En compensación, unos meses antes, IBM obtuvo de las autoridades del comité bonos para los empleados que quisieran presenciar los diez encuentros que se disputarían en el estadio Azteca durante el certamen, cuyo precio, ya de por sí bajo, sería descontado mensualmente por nómina. Se...